Iluminar para mejorar nuestras emociones. El 2022 llega con tendencias donde prima la sostenibilidad, la salud mental y la personalidad. Desde nuestra habitación hasta cada espacio del hogar representa una cápsula de libertad y motivación. Un lugar donde se invite a expresarse sin restricciones y estimule la creatividad.

Cada elemento que compone tu espacio, habla por ti, y como seres humanos usamos la evocación como parte de la manifestación personal. El aplicar diseños a una sala, un dormitorio o la cocina, representan ese lienzo mental que llevamos por dentro. Es una forma de abstraer esos simbolismos que nos llevan a la emotividad. Mientras unos prefieren un estilo minimal, donde menos es más, otros se complacen en locaciones donde se hace uso de materiales de soporte arquitectónico como parte de la decoración. 

 La luz hace aparición en todos, jamás dejará de tener protagonismo, no importa el estilo que hable por ti. Para espacios con estilo modernista, el traspasar objetos hace juego con la intención decorativa. Las fuentes de luz trascienden sobre los materiales que caracterizan esta corriente: cromo, vidrio y metal. Son muy usados los spots y luces dirigibles que contrastan con los colores neutros y pisos en maderas laminadas. 

Si tus preferencias son más cercanas al diseño industrial, recomendamos luces empotradas, lámparas con cubierta de tela blanca, bombillos halógenos. 

Para los amantes del vintage, en Lumiart ofrecemos líneas especializadas en este estilo donde cobran vida objetos y texturas de décadas atrás. Para este caso se pueden incluir luces incandescentes vintage de 2 , 4 , 6 hasta 18 w, con tonalidades cálidas o plafones clásicos.

Aunque es muy usado para estructuras a las afueras de la ciudad, el diseño rústico combina el uso de la luz día con luces de pared y luces colgantes con acabados en cobre, que matizan el uso de maderas, tonos terracota y texturas en piedra, propias de este estilo. 

En el caso de casas con techos altos, cercanas al prototipo clásico, las lámparas colgantes o suspendidas con detalles en cristales, son la opción más acertada. Sus finos acabados en cromo, multiplican la capacidad reflectiva y lumínica en salas, comedores y pasillos.